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Dioses y hombres de piedra

Dioses y hombres de piedra

Dioses y hombres de piedra

«Dioses y hombres de piedra»: de esta manera, el arqueólogo Enrico Atzeni ha interpretado sintéticamente el valor simbólico de los tres tipos de esculturas megalíticas (menhires protoantropomórficos, menhires antropomórficos, menhires de estatuas o estelas de estatuas) atestiguadas en Cerdeña entre el cuarto y el tercer milenio antes de Cristo.

La definición de «menhires protoantropomórficos» se utiliza en referencia a los monolitos caracterizados por su desarrollo en altura (en Cerdeña se conocen ejemplares que alcanzan una altura considerable de cinco o incluso seis metros) y «anicónicos», es decir, sin una representación real. Se caracterizan por tener una cara plana (se supone que esta era la cara principal) y una forma ojival tanto en el perfil frontal como en la parte posterior. La técnica de procesamiento es el martilleo, que los ejecutores de estas obras demuestran dominar con maestría.

En cambio, se utiliza el nombre de «menhires antropomórficos» en referencia a un segundo tipo de monolitos. Se diferencian de los menhires protoantropomórficos por el esfuerzo manifiesto de atribuir a la forma frontal de la escultura un boceto que parece interpretable como una representación fuertemente esquemática de los hombros y la cabeza de un ser humano. En algunos ejemplos, esta representación se hace más efectiva por la presencia de una representación, siempre esquemática, del rostro humano.

Las «estatuas-menhires» (también llamadas «estatuas-estelas») acentúan fuertemente el predominio de la cara frontal. La parte superior se caracteriza por la apariencia de un rostro sin ojos ni boca, representado únicamente por las cejas y la nariz unidas en el característico patrón en «T». La sección «pectoral» está ocupada de diversas formas: puede presentar corrientes cónicas o «tablillas», interpretadas como pechos esquemáticos (en estos casos, la estatua se clasifica como «femenina»); o el patrón del llamado «tridente invertido» o «candelabro» (una imagen que recuerda lo «invertido» presente en el interior de algunas domus de janas y luego interpretado como una figura antropomórfica «invertida» perteneciente a un «mundo de los muertos» (imaginado como «invertido» en comparación con el «mundo» normal de los vivos»), debajo del cual aparece un doble puñal (hoja triangular) (en estos casos estaríamos en presencia de figuras «masculinas»).

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9/9/2023 - 14:30

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